El líder de la pandilla haitiana identificada como 400 Mawozo se enfrenta a una posible sentencia de cadena perpetua, luego de que a principios de año se declarara culpable de facilitar la compra y contrabando de armas de alto calibre desde Florida, EE.UU. a Haití, presuntamente con dinero proveniente del rescate de ciudadanos estadounidenses.
Germine Joly, conocido como “Yonyon”, enfrenta un juicio federal junto a tres cómplices de Florida por violar las leyes de exportación de los Estados Unidos y lavado de dinero, entre otros delitos.
El pandillero se declaró culpable a principios de este año y ahora los fiscales piden cadena perpetua, alegando que “es responsable de una actividad ilegal específica que sustenta sus condenas por lavado de dinero: múltiples tomas de rehenes de ciudadanos estadounidenses”, según recoge el Miami Herald.
A pesar de que un informe de la oficina federal de libertad condicional recomienda que Joly, de 32 años, sea sentenciado a 20 años de prisión seguidos de 36 meses de libertad condicional supervisada, los fiscales federales buscan una sentencia que lo lleve a prisión de por vida.
La justicia estadounidense acusa a los 400 Mawozo de secuestrar a dos grupos de misioneros de varios países en 2021, sin embargo, estos no son la parte central de este caso contra July, que ya enfrenta un juicio separado por ellos, sino el rapto de tres ciudadanos estadounidenses entre junio y agosto de ese mismo año.
Durante ese tiempo, los fiscales afirman que el pandillero estuvo involucrado en facilitar un esquema de conspiración de armas, decidiendo el tipo de armas de fuego a adquirir para que su pandilla llevara a cabo sus operaciones violentas en las afueras del este de Puerto Príncipe, y también era responsable de “administrar y controlar las actividades de toma de rehenes de la pandilla” y comandar la disposición de sus pagos de rescate.
“Estos delitos muestran un completo desprecio no solo por la ley y la seguridad de Estados Unidos, sino un completo desprecio por el destino del país de Haití y su gente”, dijeron los fiscales federales en documentos judiciales presentados recientemente antes de la sentencia de Joly el 24 de junio.
En tanto, los abogados de Joly han cuestionado la evaluación de los fiscales de la evidencia y su recomendación de cadena perpetua, diciendo que debería ser enviado a prisión por no más de 17.5 años.
La dura postura de los fiscales hacia el pandillero, coincide con una creciente presión sobre las autoridades estadounidenses para detener el flujo ilegal de armas y municiones a Haití.
Un senador demócrata aseguró la semana pasada que el 97 % de las armas de fuego incautadas en República Dominicana son de origen estadounidense. Estados Unidos y República Dominicana están en la ruta del tráfico ilícito de armas hacia Haití.
“Una sentencia que es demasiado indulgente transmitiría el mensaje equivocado, incluso a otros líderes de pandillas que permanecen en Haití y continúan causando estragos en la seguridad del país y cometiendo delitos contra ciudadanos estadounidenses”, dijeron los fiscales federales. “En lugar de eso, la Corte debería enviar un mensaje a los líderes de las pandillas de Haití —y a aquellos que apoyarían sus brutales planes criminales— de que las violaciones de la ley estadounidense serán castigadas seriamente”.
“Mi mayor temor es la posibilidad de que mi madre fallezca mientras estoy encarcelado”, escribió Joly al juez en un intento de obtener una sentencia menos dura.
“Humildemente les pido perdón y les prometo solemnemente que nunca más me involucraré en tales fechorías. Todo lo que anhelo es la oportunidad de reunirme con mi familia”, agregó el pandillero.
Tomado de Agencias