Ha pasado un año de la explosión en las cercanías del mercado modelos de San Cristóbal y el Parque Central, la cual causó la muerte de 42 personas, provocó heridas a otras 59 y dejó un saldo de 12 desaparecidos.
Este miércoles, familiares en medio del dolor y la angustia recordaron a sus víctimas.
Como se recordará, la explosión ocurrió alrededor de las 3:10 p.m., en la calle Padre Ayala, donde operaba la empresa Vidal Plast, afectando varios establecimientos y vehículos.
Las víctimas sufrieron quemaduras graves y los residentes fueron testigos de como las personas salían despavoridas, con la piel desgarrada y algunas sin extremidades, producto del incendio que provocó la explosión en un centro comercial, que presuntamente se dedicaba a la producción de plásticos.
De acuerdo al Informe de evaluación de la explosión e incendios del antiguo mercado de la calle Padre Ayala, la detonación se originó debido a la difusión de gases de combustible, principalmente generados por el calentamiento de los plásticos, en el área donde se almacenaban y reciclaban.
Además, el documento detalló que, seguida de la explosión, se generaron varias deflagraciones generadoras de ondas expansivas. Estas afectaron edificaciones y vehículos en entorno. En adición a esto, se generó también gran cantidad de energía calorífica.
“Las investigaciones nos arrojan que este lugar contenía acumulaciones de gases y materiales inflamables. Estos, con chispas, ignición, calor o fricción pudieron generar la activación de dicha explosión”, explicó la comisión evaluadora en el informe.